Defensa de Hugo Soria, sindicado como uno de los presuntos autores intelectuales del crimen de 4 ambientalistas presentó pedido de sobreisimiento.
Edwin Chota, Jorge Ríos, Leoncio Quintisima y Francisco Pinedo fueron asesinados con tiros de escopeta en septiembre del 2014, crímenes por los cuales el Ministerio Público ha solicitado 35 años de prisión.
A finales del 2019 marcando un hito en la historia judicial del país, las autoridades presentaron una acusación penal por el asesinato de cuatro ambientalistas que luchaban en la comunidad nativa Saweto, contra la destrucción por parte de madereros de los bosques de esta parte de la Amazonía.
En aquel entonces el fiscal a cargo de las investigaciones, Otoniel Jara, argumentó el pedido de 35 años de cárcel contra dos empresarios madereros y tres taladores por el asesinato a tiros en 2014 de los cuatro indígenas asháninka, considerado como el mayor ataque contra ambientalistas en Perú.
Este miércoles 26 de mayo se llevó a cabo una audiencia del Caso Saweto, Margoth Quispe Anaya, coordinadora de la ONG Rain Forest US, detalló que la misma se dió para pasar de la etapa preparatoria a la etapa de enjuiciamiento. De igual forma, dijo que no obstante la defensa de Hugo Soria, empresario maderero sindicado como autor intelectual del asesinato de los líderes indígenas, presentó un pedido de sobreisimiento respecto a este.
Al finalizar la audiencia, los familiares de Jorge Ríos, uno de los cuatro pobladores de Saweto asesinados en setiembre del 2014, se reunieron con el presidente de la Corte Superior de Justicia de Ucayli, Américo Torres Lozano, para informarle sobre la situación en la que está el caso.
Por su parte el titular de la CSJU considera importante que los familiares de las víctimas de Saweto logren justicia, pues esto será un referente para otros casos de crímenes a líderes indígenas asesinados por defender sus territorios.
Según la investigación, los empresarios madereros José Estrada y Hugo Soria son considerados autores intelectuales del crimen y los taladores Eurico Mapes, Josimar Atachi y Segundo Atachi son señalados como los ejecutores de los asesinatos.
Samir Linares
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